Desde tiempos remotos, el ser humano ha optado por buscar el desarrollo económico usando varios caminos, siendo uno de éstos la industria de la construcción y obras civiles como históricamente lo hemos observado. Éstas han sido unas de las actividades humanas que mayor impacto y presión han generado sobre el ambiente. Por todo esto, desde hace varios años “se ha buscado la manera de prevenir, mitigar, corregir y compensar todos estos impactos” (Opazo, 2019), para ello, una de las metodologías utilizadas en muchos de los casos es la aplicación y análisis de indicadores de cumplimiento ambiental.