En la actualidad, los mecanismos de remediación del medio ambiente van encaminados a emplear agentes biológicos con el fin de minimizar los efectos adversos de ciertos procesos, principalmente químicos que han sido usados para dar solución a los problemas ambientales. El petróleo, uno de los recursos naturales más explotados en nuestro planeta, se ha convertido también en una importante fuente de contaminación debido a que este compuesto y sus derivados son de difícil degradación y pueden permanecer activos durante tiempo prolongado. Ante esta situación se pretende dar una alternativa biorremediadora basada en la caracterización de cepas bacterianas nativas con capacidad hidrocarburolítica a partir de muestras del pozo petrolero de San Sebastián, Lorica, departamento de Córdoba. De estas muestras se aislaron e identificaron cuarenta cepas a las cuales se evaluó la capacidad de degradación de hidrocarburos, resultando las especies Burkholdelia cepacia, Pseudomona putida, Pseudomona fluorescens y Pseudomona aeruginosa las más resistentes a concentraciones importantes de petróleo crudo.