La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OECD) define a la Minería Artesanal y de Pequeña Escala (MAPE) como las operaciones de minería de carácter formal o informal con formas de exploración, extracción, procesamiento y transporte predominantemente simplificadas. Se desarrolla principalmente en zonas rurales de países en desarrollo, y se establece, en la mayor parte de los casos, como una economía de subsistencia. Se caracteriza por ser un sector de trabajo mayoritariamente informal, con un nivel bajo de mecanización, intensivo en mano de obra, capital bajo y poca productividad. Es un sector que cuenta con información limitada sobre la producción, las operaciones, los ingresos, e incluso la localización geográfica de las actividades. Su contribución real a la economía es difícil de estimar, y la definición y aplicación efectiva de marcos regulatorios es aún un reto a nivel global (OECD, 2016).